Conservar tu mandato depende de que logres garantizar que la lealtad de otros grupos se mantiene en niveles razonables. Existen varias acciones políticas disponibles para ayudarte a lograrlo o conservarlo, la mayoría de las cuales supone un elevado coste financiero o político, o ambos. El coste político siempre supone una pérdida de apoyo de unos cuantos individuos de la clase patricia, lo que a cambio afectará de forma inmediata al grado de influencia de tu grupo. Sin embargo, estas acciones pueden afectar a los niveles de influencia a largo plazo. Si los intentos de manipular la gravitas tienen éxito, habrá cambios favorables en los sucesivos turnos.
Al hacer clic en la imagen de un personaje en la pestaña de resumen de la facción aparecerá la interfaz de usuario, donde se pueden llevar a cabo estas acciones. Los costes se mostrarán en sus respectivos recuadros de información. No todos los personajes pueden ser objetivo de todas las acciones. Solo las acciones válidas se mostrarán para cada uno de ellos. Las acciones posibles son las siguientes:
CONSEGUIR ASCENSO
Los ascensos se pueden conseguir para los miembros de todos los grupos, tanto en tu grupo dominante como en los demás. Los efectos de un ascenso no son exclusivamente políticos, pues un personaje que reciba un alto cargo observará un impulso inmediato en su gravitas. Si ese personaje no forma parte del grupo gobernante, su ascenso conllevará un aumento de la lealtad de su grupo. Dichos ascensos también confieren rasgos cursus honorum especiales, que también poseen sus propios efectos. Esta acción se puede llevar a cabo varias veces (hasta un nivel máximo) si el personaje objetivo tiene la edad y el rango adecuados para cada ascenso sucesivo. En el primer nivel, el coste es el apoyo de varios patricios. Cada ascenso posterior conllevará un coste financiero ascendente, además de la pérdida de apoyo.
MALVERSAR FONDOS
La malversación de fondos puede ser empleada por cualquier miembro del grupo gobernante para aumentar el tesoro a cambio de su influencia y la lealtad de otros grupos. Aunque arriesgado, obligar a un personaje importante a comportarse de forma deshonesta puede ser una forma útil de potenciar los fondos para la guerra. No olvides que los intentos de malversación de fondos no siempre tienen éxito, pero siempre implicarán la pérdida de lealtad de otros grupos.
ADMINISTRADOR
Puedes enviar a un estadista u hombre de estado para que ayude con la administración de una provincia determinada para mejorar el orden público. Esta acción se puede utilizar con un miembro de cualquier grupo que no sea general ni almirante. Ese personaje obtendrá gravitas, que representa su importancia hacia el pueblo de la provincia. Si envías a un estadista del grupo gobernante, otros grupos lo considerarán un acto de codicia, lo que disminuirá su lealtad. No obstante, si se envía un miembro de otro grupo, su lealtad mejorará.
ORGANIZAR FESTÍN
Se puede enviar un estadista para que organice un festín, lo que aumentará el suministro de alimentos para esa provincia. Los generales y los almirantes no pueden llevar a cabo esta acción, pero sí cualquier otro miembro de tu grupo o de cualquier otro. Si envías a un estadista del grupo gobernante para ofrecer ayuda a las masas, otros grupos se molestarán por no haber recaído en ellos la tarea, lo que disminuirá su lealtad. No obstante, si un miembro de otro grupo es enviado para ayudar a la provincia, la lealtad de ese grupo aumentará.
SOBORNAR
El soborno tiene el sencillo efecto de mover a un personaje de un grupo de la oposición al tuyo, con un coste económico y político. Esto es útil para reducir la gravitas de la oposición e incrementar la tuya para restablecer el equilibrio político. Si tienes éxito, el personaje sobornado perderá gravitas cuando cambie de grupo. El coste económico también es mayor para los personajes con mucha gravitas. Esta acción solo se puede utilizar en un gobierno de república o imperio.
ADOPTAR
Esta acción es similar a la anterior, pero tan solo se puede utilizar en un gobierno de monarquía. Además, el objetivo no pierde gravitas cuando pasa a tu grupo. Ten en cuenta que no es posible adoptar o sobornar a los líderes de los grupos.
ASEGURAR LEALTAD
El modo más directo de aumentar la lealtad de un grupo de poca confianza es mediante un regalo económico, para el que se usarán algunos de los fondos para la guerra para garantizar que seguirá dispuesto a acatar tu mandato. Esta acción no se utiliza sobre un miembro de un grupo, sino sobre el propio grupo opositor. La cantidad requerida es bastante baja para grupos insignificantes, pero cuanto mayor sea su influencia, mayor será el coste de su devoción. Prepárate para usar el tesoro si deseas evitar una secesión. Esta acción se puede utilizar en un gobierno de unión/liga o imperio.
PROVOCAR
Si no existe modo alguno de evitar el conflicto con un grupo opositor, lo más adecuado podría ser incitar su ira anticipadamente, antes de que obtengan suficiente influencia como para convertirse en una amenaza seria. En este caso, puedes usar esta acción sobre un grupo para aumentar las probabilidades de que se declaren en secesión. Esta provocación aumenta bastante las probabilidades de que una pequeña rebelión desemboque en una guerra civil de facción, así que tenlo en cuenta a la hora de encolerizar a tus rivales políticos. Esta acción conlleva un coste en oro, el cual será mayor cuanto más grande sea tu imperium. Además, solo se puede utilizar en un gobierno de monarquía o imperio.
PURGAR
Cuando un grupo rival cobra demasiada importancia, puedes retirar por la fuerza a sus seguidores de tu estado. Esto reducirá su influencia en las provincias, pero también supondrá una gran caída en la lealtad de todos los grupos, que te verán como un duro dictador. Cuanto mayor sea el imperium de tu facción, mayor será el pellizco que la expulsión dará a tu tesoro.
DIPLOMÁTICO
Enviar a un estadista a otra facción como diplomático se puede utilizar sobre un miembro de cualquier grupo que no esté involucrado en tu entramado militar como almirante o general. Ese personaje viajará hasta la facción elegida para negociar una relación beneficiosa para tu estado. Tras varios turnos de negociación, regresará al Senado con los frutos de su trabajo. Si tu diplomático lleva a cabo un trabajo sutil y adulador, podría ser recompensado con oro, con una bonificación, ¡o incluso con tierras! No obstante, si el mediador no se desenvuelve con maestría, las relaciones podrían empeorar y él podría incluso perder la vida.